Pasar al contenido principal

 

Vale, ¡dejaré los refrescos! ¿Pero qué bebo?

08 Jun

3 opciones menos atractivas al principio, pero que te mantendrán hidratado, sano y libre de culpa cuando se te antoje un refresco.

Refrescos, refrescos, refrescos... ¿No estás un poco harto? ¿No? Bueno, a decir verdad, te entendemos, es cierto que están buenos. Es dulce, efervescente en la boca. Pero, ¿es realmente sano? Ya sabes la respuesta, ¡y es no! Entonces, ¿por qué sustituirlo?

Té helado: fresco y sabroso.

Es tu nuevo mejor amigo para beber. Repleto de superpoderes: es antioxidante, te da ánimos cuando no estás en plena forma y te refresca cuando sube el mercurio. Además, prepararlo es un juego. Elige tu té -verde, negro, blanco o incluso afrutado-, dale un baño helado y ¡listo! Si te gusta el dulce, añade una cucharada de miel o una pizca de sirope de agave. ¿Y por qué no darle el toque final? Un chorrito de limón o una pluma de menta, y tú serás protagonista de tus propias delicias.

Agua con gas infusionada: ¡da rienda suelta a tu creatividad!

Es la gemela de la gaseosa. Tiene ese pequeño "no sé qué " que hace cosquillas en las papilas gustativas, y puedes darle tu propio toque con sabores naturales y dulces como la miel. Casi podrías olvidar que es un billete sencillo al destino de la salud. Seguro que conoces el clásico dúo de limón y menta, pero ¿has jugado alguna vez con frutas frescas o especias? ¿No? Entonces es hora de dar rienda suelta a tu imaginación y preparar tu propia poción mágica.

El néctar de los néctares: el agua de coco

Y el trofeo a la bebida divina es para... ¡Agua de coco! La encarnación perfecta de la sencillez. Directamente del buffet libre de la Madre Naturaleza, lista para usar. Tanto si la bebes directamente de la fruta como de una lata, es tan sencillo como un juego de niños: enfriar, abrir, disfrutar. Y ya está, transportado en un abrir y cerrar de ojos a una playa tropical, con el sonido de las olas de fondo, el parloteo de los loros y el olor de las flores exóticas. Ah, ¿no estamos allí?

Despídete de los refrescos y elige estas refrescantes y deliciosas alternativas para mantener tu cuerpo y tu paladar contentos. Porque como dice el famoso refrán: si te quieres, hidrátate.