La respiración, que a menudo se pasa por alto, es un verdadero alivio del estrés que puede utilizarse en cualquier momento. Para tranquilizar tu mente, calmar tus emociones y aclarar tus pensamientos, aquí tienes 3 tipos de ejercicios de relajación fáciles de hacer.
- 1. Liberar la tensión con la respiración inversa
- Siéntate o túmbate para liberar la tensión en el diafragma mientras fortaleces los músculos abdominales.
- Inhala todo lo posible retrayendo el vientre bajo las costillas y exhala por la boca contrayendo los músculos abdominales.
- Repite la serie de 5 a 10 veces.
- 2. Gestione sus emociones con la coherencia cardíaca
- Utiliza la técnica de biorretroalimentación de la coherencia cardíaca para regular su ritmo cardíaco con un patrón de respiración regular
- Inspira profundamente contando hasta 5 y espira lentamente contando hasta 5
- Repite la serie 30 veces
- 3. Tranquilízate con la respiración nasal alternada
- Siéntate en una silla, en el suelo o en un cojín.
- Bloquea la fosa nasal derecha con el pulgar e inhala durante 4 segundos por la fosa nasal izquierda.
- Mantén la respiración durante 16 segundos y exhale durante 8 segundos.
- Repite, esta vez bloqueando la fosa nasal izquierda.
- Repite la serie 10 veces al principio y aumenta gradualmente
En sus marcas... ¿preparado? Respira.