Pasar al contenido principal

 

¡Dibújame un plato de comida equilibrada!

05 Jul

Ya sea en casa, en un restaurante o durante la pausa para comer en la oficina, recuerda la regla del "cuarto, cuarto, mitad" para estar "en forma" o simplemente sentirte bien contigo mismo.

Mitad verduras

Empecemos con una verdad difícil de “tragar”: las patatas no son verduras. Son hidratos de carbono. Es hora de conocer otros alimentos. Los que son realmente buenos para ti: brócoli, zanahorias, calabacín, pimientos y apio. Para perder peso y evitar el caer en coma después de comer, reserva la mitad de tu plato para las verduras y la fruta.

Un cuarto de proteína

Tenemos una buena noticia para ti: ¡la carne no engorda! Pero seamos claros: hablamos de carnes magras, 100 gramos de pollo o pescado por comida, y cocinadas con poca grasa. Las buenas noticias no acaban ahí. Las proteínas también vienen en forma de garbanzos (un hummus es un buen almuerzo), lentejas (tan sabrosas), por no hablar de nuestras amigas de toda la vida: las alubias.

Un cuarto de carbohidratos

Sí, la pasta es un carbohidrato, pero lee lo que pone arriba: ¡hemos dicho una cuarta parte del plato! Pon ahí lo que quieras: pasta, arroz, pan, patatas... para conseguir un poco de empuje y energía. Sólo un consejo: apuesta siempre por el integral, que sacia más y tiene menos calorías.

Agua y sudor

Sí, llevar una dieta equilibrada no es suficiente, pero es un buen comienzo. Por supuesto, no te olvides de beber (al menos 1,5 litros al día) y de moverte.

 

Ahora que sabes todo esto, comparte con nosotros tu plato "cuarto, cuarto, mitad" para inspirar y dar ejemplo al equipo de trabajo (sí, suena un poco forzado, pero la intención es buena).